Uno de los elementos más importantes en cualquier diseño gráfico, y también web, es la tipografía (o tipografías).
La fuente elegida para tu diseño puede ser la que lo haga triunfar, o por el contrario,
la que destroce un diseño.
Existe ahora mismo una tendencia muy utilizada en las redes sociales y es la de los diseños que se basan en citas o frases motivadoras. Unos ejemplos de este tipo de carteles, serían los del exitoso Mr Wonderful o los carteles virales de Keep Calm and (…)
El punto fuerte de este tipo de carteles es la tipografía, y depende como la utilices, tendrás un buen resultado (como en los casos mencionados) o no.
Si estás pensando en unirte a esta moda de los carteles diseñados con tipografía, te recomendamos que leas estos 5 consejos que te damos,
aunque más bien son 5 cosas que NUNCA deberías hacer
con las tipografías.
Desde un punto de vista racional, no tiene demasiado sentido que escojas dos letras demasiado iguales, básicamente porque si se parecen tanto es porque podrías pasar sin una de ellas. Esto puede parecer algo obvio, sin embargo es uno de los mayores errores en las composiciones gráficas y sobretodo en los sitios web.
Es mejor que dos letras sean muy diferentes a que sean muy iguales.
Por tanto, nunca combines Futura con Helvética, Caslon con Garamond o Baskerville con Times.
La mayoría de la gente siente una simpatía especial por este tipo de fuentes. Tipografías con todo tipo de formas, huellas, caras… Utilizar este tipo de tipografía desvirtúa el diseño. Hay que separar el vector o la imagen del texto. El texto de un diseño debe ser legible. Su razón de ser es precisamente esa, dar una información. Por norma general las tipografías de fantasía no son legibles y además si se juntan con imágenes o recursos vectoriales acaban recargando el diseño y mandando un mensaje equivocado.
Es un recurso que está bastante de moda ahora mismo. Puede que en ocasiones quede bien en la composición completa de un diseño, pero no es recomendable abusar de este tipo de tipografías, por problemas de legibilidad.
Hay muchos tipos de fuentes script, si necesitas utilizar una de ellas como recurso gráfico para transmitir algo concreto en tu diseño, hay dos cosas que no debes hacer nunca con ellas. Una es convertirlas a mayúscula, y otra alterarle el interletreado. Si haces esto con este tipo de tipografías te cargarás tu diseño.
No todas las tipografías tienen familia con diferentes variables y pesos, y es por esto, que en ocasiones, se decide utilizar la variable deseada que nos ofrece el software de diseño que estamos utilizando.
Eso de convertir una tipografía a negrita, sin que exista la variable dentro de la familia tipográfica deja una letra hosca y convierte el diseño en una chapuza. En el caso de la cursiva, es peor todavía, puesto que lo que hace el software es simplemente inclinar la tipografía, cuando una cursiva real tiene otro dibujo de letra.
Si realizas una composición de texto, ya sea para párrafo o titular, evita dejar en la última línea una palabra huérfana o viuda.
Obviamente, hay diseños que requieren que no se tenga en cuenta esta premisa, si por ejemplo compones un titular en el que cada línea la forma una única palabra.
Estos consejos son una selección del libro de Enirc Jardi “Veintidós cosas que nunca debes hacer con las letras (que algunos tipógrafos nunca te dirán)».
Sobra decir que en ocasiones, la mejor regla es no tener reglas, todo depende de lo que desees trasmitir con tu diseño y tu tipografía. Aún así, nosotros recomendamos que se sigan unas premisas básicas para cuidar las tipografías seleccionadas para nuestros diseños, puesto que son estas las que pueden hacer tu cartel el mejor, o bien el más horroroso.